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Qué quieren los prieguenses

Prieguenses hay muchos y, seguramente, cada cual tendrá sus preferencias y sus opiniones sobre lo que se debe o no hacer en la política local. Seguramente también cada cual expresó esas preferencias con su papeleta de voto en las últimas elecciones municipales. Pero de eso hace ya mucho tiempo y las cosas han cambiado bastante desde entonces.
Es cierto que nuestra democracia es representativa y que dotamos a nuestros representantes de la potestad de tomar decisiones en nuestro nombre. Pero eso no quiere decir que todo lo que hagan nuestros políticos responda a lo que queremos o a lo que nos dijeron que harían. Cuando se utiliza tanto el interés general o lo que es mejor para todos, hay que actuar en consecuencia y olvidar el propio interés, o el del partido, o las ganas de perpetuarse en el sillón.
Se dijo en el pasado Pleno, por ejemplo, que los prieguenses queremos, y es bueno para todos, que la piscina funcione y que la plaza de toros acabe de rehabilitarse. No lo dudo. La pregunta es si lo queremos a cualquier precio, a toda costa, y precisamente ahora, como si los baños y los toros pudieran hacernos olvidar la situación de crisis que viven las familias y la propia institución municipal.
Mantener la piscina hasta diciembre e intentar terminar la plaza de toros cuesta 210.000€. Los contratos sociales que ha pagado el Ayuntamiento 33.588’27€. Acondicionar el camino de la Tejuela y el de Quiroga, sobre todo de cara a la próxima campaña, cuesta 86.466’24€. Ambas cantidades podían financiarse con lo que se llaman “mayores ingresos” (155.131’29€), es decir, ingresos por agua, alcantarillado, etc. que se habían presupuestado por debajo de lo que se ha acabado ingresando. ¿De dónde sale, entonces, lo que cuestan la piscina y la plaza de toros? De lo que, de momento, no se tiene que pagar por intereses y amortización de la deuda municipal. No nos engañemos: la deuda sigue ahí, y sigue creciendo, pero como hace poco se renovaron las pólizas (se “refinanciaron”), hay un pequeño respiro en el plazo para volver a pagar los intereses e ir amortizándola. Cuando llegue ese momento, ya no tendremos esos 210.000€ que se llevarán la piscina y la plaza.
Quizá sea esto lo que quieren los prieguenses. Quizá también quieran que les suba el recibo de la basura porque “es mejor para todos” que se recoja todos los días de la semana. O cuando haga falta, como dijo el Concejal de Infraestructuras. Me consta que otros prieguenses prefieren más crédito para más contratos sociales que ayuden a sobrellevar un poco mejor la crisis; que la partida para ayudas sociales sea mayor, incluyendo las ayudas para gastos de hipoteca que ahora nos vienen grandes; que se refuerce el personal dedicado a la bolsa de trabajo para que se ponga en marcha de una vez y se acabe con las contrataciones irregulares; que se convoquen todas las plazas comprendidas en la oferta de empleo público del Ayuntamiento; que se destine alguna partida presupuestaria a crear suelo industrial de calidad… O, tratando otro asunto, ¿quieren los prieguenses y es bueno para todos que el equipo de gobierno utilice las empresas mixtas del agua y del cementerio, empresas financiadas en parte con el dinero de todos, como moneda de cambio para pagar favores, sentando en el consejo de administración a quien más le favorece? No lo creo.
Quienes están empezando a utilizar ya el salón de plenos como entrenamiento para la campaña electoral deberían recordar que la verdadera arena política está en las calles de nuestra ciudad, donde los prieguenses sí pueden decir lo que quieren y lo que no.